Crea el proyecto La yerra de las voces para la exposición Ensayos sobre lo cutre. Lecturas del Archivo Miguel Benlloch.
El Puerto de Santa María, 1983. Borra su primer apellido para homenajear la herencia de su madre. Rebautizado Álvaro Romero, traslada esta búsqueda identitaria a su propia voz, iniciando un camino de ruptura con la concepción tradicional del cante jondo reconvertido en herramienta de activismo.
Se forma en Sevilla a partir de la escuela clásica flamenca con la que más tarde romperá, comienza a colaborar con las principales peñas del territorio andaluz, como solista y acompañando a figuras del panorama flamenco. En compañía de ell+s, y en solitario, recorre la geografía española y se presenta en Grecia, Alemania, República Checa, Inglaterra, Escocia, Italia, Noruega, Rusia, México, Canadá y Japón.
De 2014 a 2019, trabaja como cantaor acompañante en el Centro Andaluz de Danza. Fuera de los tablaos ha colaborado, en 2012, con el colectivo FAAQ de Granada a partir de la obra de José Val del Omar, junto a bulos.net y Zemos98; en 2016 aparece en el filme NO, un cuento flamenco de José Luis Tirado y es coautor de la banda sonora. Implicado en el activismo queer, ha participado en la performance Animals (Teatro de la Maestranza, 2018, y Teatro Fernán Gómez, 2019) junto a Cristina Hall; o en Pensaor, de Fernando López Parra. En 2018 es invitado por Angélica Liddell a participar en la creación de Una costilla sobre la mesa: madre, interpretando varios estilos de saetas. Actualmente está involucrado junto a Toni Martín en un proyecto discográfico a partir de música electrónica y textos de poetas homosexuales, entre ellos, Pedro Lemebel.
